El Marte rover Curiosity de la NASA ha "probado" suelo marciano por primera vez, evaluando si contiene ingredientes para la vida microbiana, luego de haber sido detenido previamente por la presencia de brillantes fragmentos en el suelo.
El equipo químico y mineralógico del rover (CheMin) está analizando esta muestra para determinar qué minerales contiene, lo cual se determinará mediante difracción de rayos X, una técnica que el CheMin utilizará por primera vez y que consiste en dirigir un haz de rayos X tan fino como un cabello humano.
Cuando el haz interactúa con la muestra de roca o suelo, algunos rayos X son absorbidos por los átomos emitiendo una fluorescencia característica y particular, que permite a la NASA identificar cada mineral de la muestra.
Respecto al material brillante detectado, el científico John Grotzinger, del Instituto de Tecnología de California, dijo a periodistas en una conferencia telefónica:
"Si bien no se descarta por completo la posibilidad de que se trate de escombros del rover, la mayor parte del equipo ahora cree que son de origen natural, tal vez un mineral que fue fracturado por la pisada del rover".
El Mars Science Laboratory rover tomó la muestra después de llegar al Intriga Glenelg, un área en la que existen tres diferentes tipos de terreno, y su análisis ayudará a decidir dónde taladrar el suelo.
Respecto al material brillante detectado, el científico John Grotzinger, del Instituto de Tecnología de California, dijo a periodistas en una conferencia telefónica:
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