Dos dinosaurios devoradores de dinosaurios que murieron hace 125 millones de años sin poder completar su digestión, fueron descubiertos en la provincia china de Liaoning por un grupo de paleontólogos de la Universidad de Alberta en Canadá y la Academia de Ciencias Geológicas de China, obteniendo profusa información sobre cómo se alimentaba y cazaba su especie.
Uno de los dinosaurios, del tamaño de un lobo y de unos dos metros de longitud perteneciente a la especia Sinocalliopteryx gigas, había devorado un Sinornithosaurus, un pariente alado de los temibles velocirraptors, que comía carne y, probablemente, era capaz de volar o planear durante unos metros.
Pero gracias al infortunio que le impidio completar su digestión ( probablemente atrapados por las cenizas de un volcán ), es que los científicos han podido obtener mucha información sobre ellos en un estudio que aparece publicado den la revista PLoS.
En el interior del primer individuo, se encontró fosilizada parte de la pierna de un Sinornithosaurus, un dinosaurio de la familia de los Dromaeosauridae (lagartos corredores)., confirmando su estilo de vida cazador y depredador, mientras que en el segundo se hallaron restos fosilizados de dos Confuciusornis, un tipo de pájaro primitivo, y de otro animal que podría ser un Psittacosaurus (lagarto loro), pero que no pudo ser identificado con seguridad. En ambos casos se confirmó que no se trataba de carroña, sinó que habían sido previamente cazados y devorados.
Si se asume que los Sinocalliopteryx eran depredadores, los fósiles chinos cuentan también alguna cosa más sobre su forma de cazar. ya que el trozo de pierna del familiar del velocirraptor, correspondería a un individuo de casi un metro de longitud, lo cual demuestra que eran capaces de capturar y devorar a otros carnívoros de gran tamaño, poco menos que la mitad del suyo, y una extraordinaria habilidad para atrapar a los voladores, ya que si bien tenían plumas eran incapaces de volar.
“Es la primera evidencia directa de un raptor convirtiéndose en la comida de otro depredador”, asegura Scott Persons, investigador de la Universidad de Alberta y coautor del estudio.
Uno de los dinosaurios, del tamaño de un lobo y de unos dos metros de longitud perteneciente a la especia Sinocalliopteryx gigas, había devorado un Sinornithosaurus, un pariente alado de los temibles velocirraptors, que comía carne y, probablemente, era capaz de volar o planear durante unos metros.
En el interior del primer individuo, se encontró fosilizada parte de la pierna de un Sinornithosaurus, un dinosaurio de la familia de los Dromaeosauridae (lagartos corredores)., confirmando su estilo de vida cazador y depredador, mientras que en el segundo se hallaron restos fosilizados de dos Confuciusornis, un tipo de pájaro primitivo, y de otro animal que podría ser un Psittacosaurus (lagarto loro), pero que no pudo ser identificado con seguridad. En ambos casos se confirmó que no se trataba de carroña, sinó que habían sido previamente cazados y devorados.
“Es la primera evidencia directa de un raptor convirtiéndose en la comida de otro depredador”, asegura Scott Persons, investigador de la Universidad de Alberta y coautor del estudio.
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