Un nuevo y violento bombardeo de erupciones solares perturbó la Tierra con partículas, incluyendo una explosión que afectó las transmisiones de radio en toda Europa.
El Observatorio de Dinámica Solar de la NASA registró una llamarada solar de clase M5.6 a partir de una enorme mancha llamada AR1515 en el hemisferio sur del sol, y si bien la explosión de partículas no llevaba direcciòn a la Tierra, sus cargas causaron breves interferencias de radio en toda Europa.
La explosión alcanzó su punto máximo con una llamarada de clase M5.3 el 4 de julio.
El Observatorio de Dinámica Solar de la NASA registró una llamarada solar de clase M5.6 a partir de una enorme mancha llamada AR1515 en el hemisferio sur del sol, y si bien la explosión de partículas no llevaba direcciòn a la Tierra, sus cargas causaron breves interferencias de radio en toda Europa.
La explosión alcanzó su punto máximo con una llamarada de clase M5.3 el 4 de julio.
Las eyecciones de masa coronal son causadas por la dinámica de torsión del campo magnético del Sol y contienen miles de millones de toneladas de gases, rayos X y radiación ultravioleta, con una temperatura de alrededor de cien millones de grados centígrados.
Cuando la Tierra es ocasionalmente alcanzada por estas explulsiones, dá lugar a impresionantes espectáculos de luces brillantes y auroras boreales visibles desde lugares atípicos, como resultado de la reacción del hidrógeno y otros gases que contiene la Tierra a estas partículas ionizadas, emitiendo rárfagas de energía en forma de luz.
Pero estas explosiones también pueden causar trastornos como tormentas magnéticas o afectar satélites y redes eléctricas.
Durante los próximos dos años, se espera el mayor número de tormentas solares y todas de gran intensidad, al encontrarse el Sol en el final de uno de sus ciclos de once años, que es cuando su actividad alcanza su máxima intensidad.
Cuando la Tierra es ocasionalmente alcanzada por estas explulsiones, dá lugar a impresionantes espectáculos de luces brillantes y auroras boreales visibles desde lugares atípicos, como resultado de la reacción del hidrógeno y otros gases que contiene la Tierra a estas partículas ionizadas, emitiendo rárfagas de energía en forma de luz.
Durante los próximos dos años, se espera el mayor número de tormentas solares y todas de gran intensidad, al encontrarse el Sol en el final de uno de sus ciclos de once años, que es cuando su actividad alcanza su máxima intensidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario