La gigantesca y controvertida presa de las Tres Gargantas, en China, ha puesto en marcha el último de sus generadores esta semana, en el marco del proyecto de energía hidroeléctrica más grande del mundo.
Construida sobre el río Yangtze en la provincia de Hubei, está diseñada para disminuir el riesgo de inundaciones durante la temporada de lluvias, así como almacenar y distribuir agua durante los periodos secos.
Una serie de fotos increíbles muestran la fuerza de la liberación de siete vertederos después de que fuertes lluvias en las partes altas de la presa derramaron hasta 70.000 metros cúbicos por segundo en el embalse, en una de las peores inundaciones de la historia.
La represa tiene una capacidad generadora combinada de 22,5 millones de kilovatios, el equivalente a quince reactores nucleares, y su construccion obligó en su momento a la reubicación de 1,4 millones de personas habiendo sido fuertemente criticada por expertos de todo el mundo, pero Pekín la considera un símbolo de su destreza en ingeniería y una solución a las frecuentes inundaciones del río más largo de China, además de una fuente de electricidad que tanto se necesita.
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