El propio Stephen Hawking se encuentra participando del desarrollo de esta tecnología capaz de convertir la actividad mental en palabras: el iBrain, un scaner inventado por Philip Low, capaz de medir la actividad eléctrica mental y potencialmente convertirla en palabras, aunque aún se encuentra en una etapa experimental, de la cual participa personalmente el legendario fìsico de 70 añós, que ya lleva tres dècadas casi completamente paralizado y que se ha estado comunicando durante ese tiempo con la ayuda de una computadora que interpreta los movimientos de sus músculos faciales, pero con el avance de la enfermedad, éstos también se le han ido atrofiando y se encuentra punto de perder su último punto de contacto con el mundo.
Para intentar evitar esto, iBrain "hackea" el cerebro, en este caso de Hawking, y cuando intenta, por ejemplo, mover sus extremidades en determinada dirección, el impulso creado por su mente ( que es idéntico al de un hombre sano ) es detectado por la máquina convirtiéndolo en palabras de acuerdo a un diccionario que relaciona cada intento de movimiento con una palabra equivalente.
Una vez que la máquina haya sido lo suficientmente desarrollada, podrá ayudar a personas que, como Hawking, no pueden hablar y están paralizados y conscientes, como así también a aquellos pacientes llamados "vegetativos", en los cuales se ha descubierto recientemente que reaccionan a impulsos exteriores con actividad mental, por lo cual también serían capaces de comunicarse.
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