Los residentes de Dorset, Inglaterra. quedaron desconcertados cuando luego de una gran tormenta, una sustancia misteriosa cayó del cielo.
En el jardín de un ex ingeniero aeronáutico, Steve Hornsby, en Bournemouth, se descubrieron más de una docena de pequeñas esferas azules de unos 3 centímetros de diámetro , gelatinosas y difíciles de recoger, luego de una tormenta de granizo.
En declaraciones a la BBC, el Sr. Hornsby comentó que instantes antes de que la tormenta comenzara, el cielo se había vuelto de un inusual color amarillo oscuro.
Las esferas parecen ser más suaves en su interior, no tienen olor, no son pegajosas y no se derriten.
La Oficina de Meteorología luego de haberlas analizado, indicó que la extraña sustancia extraña "no es de orígen meteorológico", mientras investigadores de la Universidad de Bournemouth especularon que podría tratarse de huevos de invertebrados marinos transportados en sus patas por las aves.
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Hornsby comentó que mantendrá las esferas en su heladera mientras intenta averiguar qué son. Hasta el momento, no ha logrado ninguna respuesta satisfactoria al enigma.
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