El bombardero norteamericano Stealth cumple 15 años este año, y los 19 B-2 de la flota de la Fuerza Aérea casi cinco años más, antigüedades que, medidas en un marco de tecnología de punta, son prácticamente inaceptables.
Los sistemas de defensa integrados a los que deben enfrentarse hoy día son mucho más sofisticados que cuando fueron creados: el Multi-radar estático, por ejemplo, que ya es de uso relativamente común, es tan sensible que puede detectarlos.
Para mantenerse a la vanguardia de los sistemas de defensa, la Fuerza Aérea tiene asignado un presupuesto de $ 3,7 mil millones de dólares durante los próximos cinco años para desarrollar un sucesor para el B-2, que podría estar activo para el año 2020.
Los diseños reales de los nuevos bombarderos son clasificados, pero algunos de los secretos han trascendido.
Patentes y propuestas del fabricante de los B-2 Northrop Grumman, , sugieren que el nuevo bombardero será más estrecho que el B-2, pero mantendría el diseño de ala voladora, que reduce el reflejo del radar, reduciendo al mínimo los bordes duros.
Los ingenieros también están probando nuevos tipos de absorción de ondas de radar en los recubrimientos, buscando suspensiones más livianas para mejorar la eficiencia del combustible, que no sea necesario aplicarlas con tanta frecuencia y que logren aumentar el rango de absorción de frecuencias del radar.
Ceno, una compañía con sede en Sanborn, Nueva York, ha desarrollado una capa más ligera y más duradera, que utiliza microesferas huecas de cerámica, llamada cenosferas.
Este nuevo recubrimiento puede ser personalizado para engañar a cada específico sistema de radar.
Los bordes duros de las tomas de aire del B-2 pueden reflejar el radar, por lo cual en un diseño visto en una patente de Northrop Grumman, el nuevo bombardero tendría en su lugar cuatro pequeños orificios en lugar de dos grandes.
Las rejillas de ventilación más pequeñas pueden ser hundidas más profundamente en el ala, reduciendo la posibilidad de ecos de radar.
Para confundir a los sistemas de radares de defensa, tendrá probablemente algo así como disparos de aire en miniatura para desviar la atención del atacante real reemplazando los señuelos clásicos que ya han sido bastante perfilados ( igualmente se está trabajando en su perfeccionamiento de velocidad y masa para confundir aún más a las defensas ).
En otro diseño de Northrop Grumman, los ingenieros incluyeron un ala canard en la nariz del avión, que brinda un sustento adicional durante el despegue y el vuelo, permitiendo transportar una carga útil más pesada.
Debido a sus líneas rectas y ángulos duros que reflejan el radar, probablemente este ala complementaria sea diseñada para plegarse y confundirse con el cuerpo de la nave al entrar dentro del alcance de los sistemas de defensa.
El nuevo bombardero probablemente contará con una sola bahía de armas ( para reducir costos ), en lugar de las bahías gemelas del B-2, y será capaz de llevar misiles guiados JDAM con GPS convencionales, ojivas nucleares, e incluso los nuevos bunker-busting Penetrator de 30 mil libras.
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