Luego de la ola de tornados, el país del norte enfrenta una inundación de proporciones gigantescas que se encuentra a punto de tapar completamente la central nuclear Cooper de Nebraska, la cual debió ser cerrada en el día de hoy, al superar el límite de seguridad contemplado para inundaciones, clausurando todas sus funciones nucleares, aunque las principales ya habían sido apagadas desde principios de abril.
La crecida del río Missouri constituye un nefasto récord, siendo la peor de todos los tiempos registrada en la zona, y ha desbordado la contención de todos los diques existentes.
El Servicio Meteorológico explicó que la crecida de los afluentes del Missouri están dentro de la normalidad para esta temporada del año, pero lo que ha afectado dramáticamente su caudal es el volúmen de deshielo proveniente de las montañas, un 140% mayor a lo habitual.
Nebraska, Missouri e Iowa se encuentran en estado de emergencia total, y con previsiones de más lluvias torrenciales que continuarán por lo menos hasta agosto.
Operarios de la planta ya habían previsto el suceso, colocando barricadas a su alrededor.
Se está analizando cerrar otras plantas que podrían también estar amenazadas por la gigantesca crecida.
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