En un lapso de tiempo no demasiado largo, las impresoras hogareñas podrían sufrir un cambio extremo de dirección en cuando a sus utilidades: con ciertas modificaciones, podrían ser utilizadas como material de primeros auxilios.
Hasta ahora hemos visto los fantásticos progresos que han tenido las máquinas en imprimir trabajando sobre plástico duplicados de diversos objetos, incluso hace poco se lo intentó con el ala completa de un avión Boeing.
Por lo tanto, si reemplazamos el plástico por las células de un donante y los ponemos en un cartucho podríamos crear un implante vivo y hecho de las células originales del donante, lo cual sería además de enorme utilidad para evitar el rechazo.
Por ahora, existen aún numerosas limitaciones, pero teóricamente es sólo cuestión de tiempo.
La impresora necesita trabajar escaneando el tamaño y la profundidad de la zona que necesita reemplazar y consecuentemente replicar el número de células.
En teoría, podría ser tan simple como una impresora de oficina con un accesorio que le permite imprimir en tres dimensiones, sólo que lo haría sobre piel en lugar de papel.
La tinta también debería obtenerse desde cultivos celulares para mantener su pigmentación original.
Pero el tema fuerte a solucionar es cómo conectar el equipo con el cuerpo humano, cómo transferir la tecnología a los tejidos del cuerpo, vasos sanguíneos, suministro de sangre y oxígeno.
ESTA BELLEZA GANÓ EL PREMIO DE DISEÑO
El joven diseñador Heikki Juvonen ganó con su e-3Pod eléctrico el primer premio de diseño con la respuesta más convincente a la propuesta de elaborar la estética de un vehículo urbano ultra-compacto, al que Citroën pudiera darle su marca.
El premio incluye seis meses de empleo en Citroen donde podrá perfeccionar su invento, que por lo pronto presenta un diseño externo espectacular, e intentar que la firma lo incorpore comercialmente a su línea.
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