Selak escapó con vida de un accidente de avión, otro de tren y varios automovilísticos.
Entre otras "hazañas" increíbles de este hombre que definitivamente conquistó el corazón de la dama fortuna, se destaca la vez en que cayó por la puerta abierta de un avión y aterrizó en un pajar, y cuando, a pocos días de oficializar su quinto matrimonio ( ¿esto será por lo desafortunado en el amor?? ) ganó casi un millón de dólares en la lotería, con lo cual se compró una lujosa casa en una isla privada, que luego vendió.
Selak asegura que es cierto el dicho que reza que el dinero no puede comprar la felicidad, y para demostrarlo donó casi toda su fortuna a familiares y amigos y regresó a su antigua y modesta casa en Petrinja, al sur de Zagreb, en el centro de Croacia.
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