Marina Chukhrova y German Pilipenko, dos controversiales psicólogos de una clínica siberiana utilizan un buen azote de nalgas con palos y bastones para ayudar a los adictos a las drogas y el sexo a recuperarse de sus vicios.
"El azote tiene una finalidad médica clara y definitiva, no es algo sado-masoquista ", aseguraron con toda seriedad al periódico siberiano The Times.
Pilipenko y Chukhrova afirman que los adictos padecen una falta de endorfinas, hormonas conocidas como "de la felicidad", y el dolor insoportable estimula al cerebro para que libere estas hormonas en el cuerpo, haciendo que se sientan mejor consigo mismos sin tener que utilizar ningún otro estimulante.
"El azote contrarresta la falta de entusiasmo por la vida que hay a menudo detrás de las adicciones, tendencias suicidas y trastornos psicosomáticos, es una inyección contra el estrés" aseguraron, indiferentes a las críticas de sus colegas.
Antes de los golpes, los pacientes reciben asistencia psicológica. Cada sesión cuesta unos 100 dólares.
FUENTE: KARTSON
1 comentario:
- que no mamen ....esto es parte del juego sexual spanking y sus derivados SMBD...sumision y bondage...jajja salutaciones
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