Investigadores de la Universidad de Illinois han desarrollado lo que han denominado un "bio-bot", una máquina biológica de 7 mm. de diámetro hecha con hidrogel y células cardíacas, que puede caminar por sí mismo.
El proyecto pretende imitar a la naturaleza para crear robots más eficientes que tengan una gran variedad de aplicaciones.
"La idea es que, al ser capaces de diseñar estructuras biológicas, podemos aprovechar el poder de las células y la naturaleza para hacer frente a los desafíos que enfrenta la sociedad", dijo Rashid Bashir, investigador principal del proyecto.
"Como ingenieros, siempre hemos construido cosas con materiales duros, y muy predecibles, pero en la naturaleza hay una gran cantidad de aplicaciones que pueden resolver problemas de manera mucho más elegante."
El robot tiene una pata larga y delgada cubierta con células de corazón de rata, que se apoya en un soporte rígido, y para moverse, utiliza el ritmo y pulso del latido cardíaco de las células, mientras los resortes implantados a través de su cuerpo hacen el resto.
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