El nivel del agua ascendió en algunas localidades del área hasta alcanzar los 2,5 metros. provocando cortes de electricidad y grandes atascos de tráfico en la zona.Según el Ministerio de Emergencias del país, cerca de 1.300 socorristas están trabajando ahora en la región de Krasnodar junto a numerosos los voluntarios.
Pese a los alertas de sirenas y altavoces emitidas horas antes del evento para advertir a la población, el propio ruido de la lluvia impidió a muchos escuchar los avisos, interrumpiéndose además el servicio de comunicación celular.
El desastre ocurrió apenas un mes después de otra devastadora inundación en la misma región que causó los mayores daños en la ciudad de Krymsk, y dejó un saldo de 170 muertas y 35.000 damnificados.
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