El Instituto para las Obras de Religión, conocido como el Banco del Vaticano, ya estaba acusado por los medios de comunicación sobre supuesto lavado de dinero de los jefes mafiosos sicilianos, pero el informe incautado por la policía al ex presidente del banco de la Santa Sede, Ettore Gotti Tedeschi, aumentó el escándalo vertiginosamente.
El dossier de 200 páginas contiene datos de cuentas cifradas del banco que ocultaban dinero sucio de políticos, empresarios y jefes de la mafia y hasta información sensible del crímen organizado.
La Fiscalía de Trapani ( Sicilia ) ha revelado información en relación a dos cuentas que tiene abiertas en el banco un joven sacerdote implicado en delitos finacieros, Ninni Treppiedi, detrás de las cuales podría estar el gran capo de Cosa Nostra, Matteo Messina Denaro, autor de innumerables crímenes y asesinatos y de paradero desconocido desde 1.993.
La reacción del Vaticano fue lanzar una advertencia a los fiscales expresando "su máxima confianza en que las prerrogativas soberanas reconocidas por la legislación internacional serán adecuadamente respetadas por las autoridades judiciales".
Y para echar más leña al fuego, se agregó ahora la misteriosa desaparición de "El Ingeniero del Papa", un hacker de 36 años de nombre desconocido considerado el guardián informático del Vaticano, quien puede acceder a su antojo al sistema de la Santa Sede, ubicado en las mazmorras del palacio papal.
La historia de este hacker comenzó cuando atacó con éxito la red informática de la Santa Sede, y al ser atrapado, el papa en lugar de castigarle le ofreció trabajo confiándole la protección de su sistema.
El dossier de 200 páginas contiene datos de cuentas cifradas del banco que ocultaban dinero sucio de políticos, empresarios y jefes de la mafia y hasta información sensible del crímen organizado.
La Fiscalía de Trapani ( Sicilia ) ha revelado información en relación a dos cuentas que tiene abiertas en el banco un joven sacerdote implicado en delitos finacieros, Ninni Treppiedi, detrás de las cuales podría estar el gran capo de Cosa Nostra, Matteo Messina Denaro, autor de innumerables crímenes y asesinatos y de paradero desconocido desde 1.993.
La reacción del Vaticano fue lanzar una advertencia a los fiscales expresando "su máxima confianza en que las prerrogativas soberanas reconocidas por la legislación internacional serán adecuadamente respetadas por las autoridades judiciales".
Y para echar más leña al fuego, se agregó ahora la misteriosa desaparición de "El Ingeniero del Papa", un hacker de 36 años de nombre desconocido considerado el guardián informático del Vaticano, quien puede acceder a su antojo al sistema de la Santa Sede, ubicado en las mazmorras del palacio papal.
La historia de este hacker comenzó cuando atacó con éxito la red informática de la Santa Sede, y al ser atrapado, el papa en lugar de castigarle le ofreció trabajo confiándole la protección de su sistema.
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