Un estudio realizado por científicos británicos confirma más que nunca que la expresión "me rompiste el corazón", protagonista de tantas tramas dramáticas, está expresado de una manera más literal que simbólica.
Un amor no correspondido, la traición o la pérdida de un ser querido pueden literalmente llegar a causar la muerte, concluyeron los científicos que bautizaron la patología como ‘síndrome del corazón roto’.
Una decepción amorosa puede crear una fuerte descarga de adrenalina que paralice las cámaras inferiores del corazón y si esta parálisis se transfiere a las cámaras superiores, puede provocar la muerte ( antes, se creía que la adrenalina sólo hacía latir más rápido el corazón ).
Pero el "síndrome del corazón roto" puede desencadenarse también por muchos otros motivos: estrés, fuertes dolores emocionales, temor al futuro sin un ser querido o incluso un exceso de alegría o felicidad.
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