A diferencia de la mayoría de las experiencias con cascos de realidad virtual, que se utilizan para interacturar en videojuegos, en San Juan de Basilea, Suiza, se ha encontrado una nueva manera de mezclar los avances tecnológicos de realidad aumentada inmersiva con el mundo real, obteníendose como resultado un verdadero sueño despierto.
Insectos surrealistas, extrañas visiones en el cielo, y figuras fantasmales son algunas de las ilusiones oníricas 3D creadas por computadora que se entretejen con la realidad originando una experiencia totalmente novedosa.
Jan Torpus, director del proyecto lifeClipper, ejecuta en un equipo con Windows 7 instalado en una mochila del usuario que se controla a través de un iPhone.
La imágenes computadas están inspiradas en películas como Día de la Independencia y Avatar, así como por artistas surrealistas como René Magritte, habiendo tenido especial cuidado en respetar las ubicaciones y contexturas de las imágenes abstractas con las reales para que los usuarios puedan circular sin tropezarse o caerse.
Peces e insectos flotan alrededor de los exploradores del parque mientras en el cielo se suceden imágenes irreales y bajo sus pies crece un césped brillante cada vez que se detienen.
El proyecto Lifeclipper se inició en el año 2003, reuniendo artistas y científicos en la búsqueda de sensaciones diferentes y nuevas ideas para aplicaciones de teléfonos móviles, mapas electrónicos y sitios web inteligentes.
La sobreposición de otros mundos paralelos entregan al visitante la referencia de una lógica alternativa y les ofrece la oportunidad de experimentar otras dimensiones.
El proyecto Lifeclipper se inició en el año 2003, reuniendo artistas y científicos en la búsqueda de sensaciones diferentes y nuevas ideas para aplicaciones de teléfonos móviles, mapas electrónicos y sitios web inteligentes.
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