Esta prótesis ( que posee una amplia gama de movimientos ) es controlada por la mente de su usuario, gracias a que los científicos han encontrado la forma de que la extremidad artificial pueda ser dirigida a través de la conexión de los nervios de los músculos del pecho del Sr.Sullivan.Cuando piensa en mover los músculos de su pecho, las señales son recogidas por los nervios que estaban conectados con anterioridad al brazo e interpretados por un ordenador que transmite la información a la prótesis.
En la misma dirección, los científicos de la Universidad Northwestern, en los EE.UU., están buscando la forma de que diferentes patrones de actividad cerebral se puedan utilizar para controlar prótesis."El comando neural debe ser interpretado en estos casos por un software que reemplaza la interpretación muscular, y el cerebro debe adaptarse a eso" explicaron los científicos.Esta tecnología puede ser empleada en amputaciones recientes, debido a que, con el paso del tiempo, los nervios que controlaban los miembros amputados se van atrofiando por su falta de uso.
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