EL SILENCIO ES SALUD
Investigadores japoneses inventaron una máquina que puede callar a otra persona casi al instante y a voluntad, como si se le aplicara el botón de “Mute” del control remoto del televisor.
Kazutaka Kurihara y Tsukada Koji, del Instituto Nacional de Ciencia Industrial Avanzada y Tecnología de la Universidad de Tskuba y Ochanomizu, han construido un arma de fuego ideal para un salón de clase ingobernable o una biblioteca ruidosa, con un alcance de hasta 30 metros que literalmente congela el cerebro captando lo dicho por el orador con un micrófono y disparando de regreso el mismo coloquio 0,2 segundos después, provocando un fenómeno acústico llamado “retroalimentación auditiva retardada”( DAF ) que hace primero tartamudear y luego callar al target elegido.
Se basa en la teoría de que cuando hablamos nuestros cerebros necesitan escuchar lo que sale de nuestras bocas, pero sin embargo lo debilita e inquieta escucharlo dos veces.
La retroalimentación confunde al cerebro y crean una sensación incómoda que la mayoría de nosotros ya ha experimentado cuando por algún problema de comunicación se produce un “feedback” en alguna conversación telefónica.
El efecto no produce ningún malestar físico y desaparece de inmediato cuando se interrumpe la retroalimentación auditiva retrasada artificialmente.
El arma es fácil de usar y se ha demostrado que funciona mejor cuando se usa contra alguien que está leyendo un discruso preparado de antemano (¡ideal para callar a políticos mentirosos!).
También se ha demostrado que es posible utilizarlo para mejorar la situación de personas con un impedimento o dificultad en el habla como el tartamudeo, mejorando notoriamente su fluidez.
No hay comentarios:
Publicar un comentario