Después de casi 90 años la Compañía Coca-Cola finalmente ha retirado su receta ultra-secreta de la bóveda del banco donde se encontraba depositada desde 1925, para ponerla en exhibición en el museo de la empresa.
Sin embargo, cualquier rival con la esperanza de echar un vistazo a la lista de ingredientes se sentirá decepcionado, ya que la fórmula ( originalmente un jarabe para la tos ) que se remonta a 1886, está herméticamente protegida por una caja de metal que se guardará en otra bóveda de alta tecnología exiswtente en el museo de la empresa en Atlanta, Estados Unidos.
Desde 1925, la fórmula se había mantenido bajo llave en el SunTrust Banks Inc. y el cambio de sitio aparentemente obedecen al próximo 125 aniversario de la compañía.
Sin embargo, la verdadera razón puede esconderse detrás de la decisión de SunTrust en 2007 de comenzar poco a poco la venta de sus acciones de Coca-Cola ( poseía originalmente más de 48 millones de acciones ), aunque ambas empresas por supuesto lo han negado.
El banco prestaba servicios de suscripción a Coca-Cola cuando ésta se lanzó a la bolsa por primera vez en 1919 recibiendo una de las primeras acciones de la burbujeante compañía.
Pero en mayo de 2007, SunTrust vendió el nueve por ciento de su participación en Coca-Cola como parte de un plan para devolver el valor a sus propios accionistas.
Al año siguiente, el banco vendió otro lote de acciones y dijo que sus 30 millones de acciones restantes se iban a poner a la venta en un plan a 7 años.
Coca-Cola Co. vende más de 1.7billiones de sus productos por día en 200 países.
Por supuesto, la ceremonia de traspaso fue una catarata de elogios mutuos entre el banco y la empresa, pero la verdad es que no se puede esperar el mismo cuidado en la seguridad de un banco que a la vez es socio que en uno que simplemente custodia intereses que le son cada vez más ajenos.
La receta de Coca-Cola fue inventada en 1886 por el farmacéutico de Atlanta John S. Pemberton, quien no la escribió para mantener el secreto y sólo era conocida por un puñado de personas. La fórmula fue adquirida posteriormente por Asa Candler en 2.300 dólares quien en 1919 vendió la compañía por 25 millones de dólares.
Fue precisamente en 1919, cuando los nuevos dueños de la compañía necesitaron un préstamo bancario y su entonces propietario Ernest Woodruff se vio obligado a escribir la receta en un papel y depositarla como garantía.
Se mantuvo en una cámara acorazada del banco en Nueva York hasta que el préstamo fue pagado en 1925, momento en el cual Woodruff la depositó en el Banco Trust Company, que más tarde se convirtió en SunTrust.
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