Quienes siguen este blog, seguramente están al tanto de los avances revolucionarios que se vienen logrando en las investigaciones con células madre.
Esta ciencia es tan contundente y ha llegado a aciertos tan importantes, que podría literalmente transformar las condiciones de salud y longevidad en el planeta.
El tratamiento que ya se había iniciado en pacientes con lesiones de la médula espinal causada por accidentes de tráfico y accidentes deportivos fue hace pocos días aclamado como "el comienzo de un nuevo capítulo en la terapéutica médica”.
Pero después de tratar a sólo 4 pacientes, sorpresivamente GERON, la única compañía farmacéutica autorizada para realizar ensayos con células madre, abortó abruptamente el proyecto, sin publicar ninguna información sobre si el tratamiento funcionó.
Se hizo muy evidente que se trató de una orden ejecutiva de características histéricas y desde arriba hacia abajo, tratando además de ocultar algo, en una típica reacción corporativa.
Esto nos lleva a pensar dos cosas: se trató de ocultar algún resultado desastroso que habría sido imposible de digerir por la opinión pública sin hacer caer sus acciones estrepitosamente, o, muy por el contrario, se trató de censurar resultados milagrosos.
Si Shell hubiera inventado un automóvil que funciona a agua en lugar de combustible ( que además de eficiente, fuera muy superior a los que hay en la calle ), primero lo vendería como curiosidad y genialidad para aumentar su prestigio, pero en cuanto estas ventas comenzaran a representar una amenaza de crecimiento exponencial, actuaría de la misma manera en que lo haría cualquier multinacional, ya que nadie escupe para arriba.
GERN, aduciendo escasez de capital y condiciones económicas inciertas, anunció que, con efecto inmediato, abandonará el desarrollo de sus programas con células madre para centrarse en sus programas de oncología de “primera clase” ( léase, traducido al español, los viejos, inútiles y muy rentables tratamientos prehistóricos ).
“Tenemos la intención de enfocar nuestros recursos en el avance de nuestros ensayos clínicos en fase 2 de imetelstat y GRN1005” expresó el comunicado de prensa de la empresa ( dos nuevos fármacos contra el cáncer, los cuales obviamente seguirán teniendo terribles efectos colaterales y precios prohibitivos ), y prometió buscar nuevos socios con recursos financieros para retomar el programa de células madre.
El sueño terminó, diría John Lennon, y los investigadores de GERN deben estar seguramente arrepentidos: o de haber cometido un grave error, o de haber sido tan brillantes en tan poco tiempo.
Probablemente, nunca sabremos las causas que originaron esta decisión, pero se hizo evidente que tuvieron un enorme peso específico.
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