El célebre Lago español Bañolas o Banyoles, cuya profundidad es desconocida y se alimenta de manantiales subterráneos, además de poseer encantos naturales que atraen a miles de turistas por año, es uno de los énclaves más enigmáticos e inexplorados de Cataluña, y forma parte del “equipo” de lagos misteriosos del planeta que esconden celosamente inquietantes secretos submarinos.
Formado posiblemente a mediados de la era Cuaternaria su origen parece ser volcánico como todo el territorio en la comarca de la Garrotxa, consecuencia de hundimientos cársticos y tectónicos, aunque el anciano profesor Frederic Corominas dedicó toda su vida a tratar de probar que el mismo se formó debido al impacto de un meteorito en una época relativamente reciente.
El lago está geológicamente activo, y pese a ser una masa de agua confinada entre rocas, se encuentra muy lejos de permanecer estático: sus impredecibles crecidas son causa constante de trastornos para los habitantes del pueblo de Bañolas, que sin embargo prospera junto a su ribera oriental aprovechando su fertilidad e irrigación natural.
Innumerables extraños naufragios y desapariciones tanto de personas como de naves (¡un avión ruso incluído! ) han tratado de ser atribuídos a la presencia de ácidos corrosivos en sus aguas, no obstante lo cual muchos bañistas se sumergen diariamente en él sin haberse reportado problema alguno de salud.
Leyendas medievales hablan de mujeres hechas de agua, hadas lascivas y presumidas que arrastraban a los hombres a sus orgías 
( y cuyos susurros y gemidos aún se pueden escuchar si uno navega el lago en la tranquilidad de la noche ), dragones marinos y otras bestias feroces que habitaban sus profundidades devorando a los aldeanos que osaban aventurarse en sus aguas. 
Se relata que el propio ejército de Carlomagno ( capitaneados por él en persona ) intentó matar o capturar a esa bestia que inquietaba a los vecinos, exigiendo incluso sacrificios humanos para alimentarse, pero fracasó en su intento, siendo su mítica espada completamente inútil ante las lenguas de fuego con que los recibió la bestia, y que luego un asceta llamado Mer lo enfrentó y logró amansarlo y pasearlo como un perrito por el pueblo, volviéndolo vegetariano.
Lo más rescatable de estas leyendas es que testimonian la existencia de uno o varios monstruos marinos sumergidos bajo las aguas al estilo de Nessie o Nahuelito, y esto es perfectamente posible, ya que en lo profundo del lecho del lago existen fosas de más de 130 metros de profundidad, misteriosos pozos a los cuales se les atribuyen conexiones insospechadas y que 
algunos geólogos relacionan con la supuesta capacidad de la laguna para predecir terremotos y otras catástrofes naturales en cualquier parte del mundo, mediante una abrupta bajada de sus aguas. 
Nuestra opinión es que éste y otros lagos profundos del planeta tienen una profundidad extrema que los conecta entre sí, y a la vez con el mar y el océano, como lo demostró claramente en Bañolas la aparición del cadáver de un buzo espeleólogo francés que había desaparecido mientras buceaba en el sur de Francia.
Sus lechos cavernosos sirven de refugio y alimento a monstruos de las profundidades ( de hecho, está comprobada la supervivencia de el prehistórico triop en este lago )
a la vez que debido a su interconexión profunda son más sensibles a los movimientos sísmicos que el mejor de los sismógrafos inventados por el hombre.
a la vez que debido a su interconexión profunda son más sensibles a los movimientos sísmicos que el mejor de los sismógrafos inventados por el hombre.Esta misma interconexión explica indirectamente sus misteriosos bruscos cambios de temperatura y sus imprevisibles crecidas, ya que son portadores indirectos de cambiantes climas acuáticos de zonas ajenas a su entorno, y que los invaden a través de sus cavernas submarinas.
NOTA: LAS FOTOS QUE INCLUYEN BUZOS NO PERTENECEN AL LAGO BAÑOLAS Y HAN SIDO INCLUÍDAS AL SÓLO EFECTO ILUSTRATIVO.
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