Si se pregunta a cualquier persona desprevenida sobre el desastre nuclear de Fukushima, lo más probable es que responda que "se trató" de una importante catástrofe ocurrida "el año pasado" en Japón y tal vez los más actualizados agregarán que finalmente, pese a que en un primer momento se negó, resultó ser la peor catástrofe nuclear de la historia, aún mayor a la de Chernobyl en Rusia.
Esta respuesta sólo está reflejando lo que el sistema de informaciones oficial ( mal llamado "periodismo" ) ha decidido que la población mundial debe saber sobre el tema.
Si en cambio se analiza la realidad tal cual es, se comprende inmediatamente el interés del mencionado sistema en ocultarla: Fukushima no sólo es el peor desastre nuclear de la historia ( por lo menos cuatro veces más desastroso que Chernobyl ) sinó que de ninugna manera debe hablarse de él en tiempo pasado, ya que continúa en curso ( y éste es el mayor de todos los peligros ), y sin el más mínimo control humano sobre su evolución ( si se desea más precisiones sobre estas afirmaciones, sugerimos ver nuestros varios anteriores posts al respecto ).
La central nuclear continúa expulsando radiación permanentemtne en la actualidad: al aire, a las napas subterráneas y al mar de Japón.
La propia administradora de la planta, la tristemente célebre Tepco, contribuye constantemente a "regar" el mar con agua radiactiva, pues lo único que se está haciendo allí es bombear agua constantemente para enfriar los reactores, y cada bombeo resulta en más agua contaminada para la cual ya no alcanzan los miles de contenedores que se apilan sin saberse tampoco aún adónde irán luego a ser depositados, y una vez que esta capacidad de almacenaje es desbordada, Tepco arroja toneladas de agua radiactiva al mar.
Si Usted está pensando que por suerte se encuentra lo suficientemente lejos de Japón, piénselo de nuevo: los vientos, las migraciones animales y las mareas están globalizadas en este planeta muchos siglos antes que la humanidad.
Así pudieron comprobarlo ahora "personalmente" los investigadores de la Universidad Stony Brook de Nueva York cuando descubrieron atún rojo con contaminación radiactiva inequívocamente "made in Fukushima" en Estados Unidos.
UNA MOTOCICLETA JAPONESA EN COSTAS AMERICANAS. DE LA MISMA MANERA, VIAJAN LAS SUSTANCIAS TÓXICAS DEL MAR.
Esto además advierte sobre el verdadero nivel espantoso de toxicidad conque se ha contaminado la zona ( ya advertido por nosotros hace tiempo ) y sobre que el ingreso al mar de cesio radiactivo continúa siendo permanente y nó un hecho único ocurrido hace un año, puesto que los peces de enorme tamaño suelen metabolizar la contaminación durante las migraciones a través de 9500 kilómetros como la que protagonizan los atunes jóvenes hacia las costas de California, pero en este caso no ha sucedido.
Los expertos se apuraron en aclarar que el nivel de radiación detactado no representa ningún peligro para el ser humano ya que se trata de una concentración pequeña ( aunque es 10 veces mayor que el nivel medio registrado en años anteriores ).
También en San Diego fueron detectados 15 atunes contaminados con isótopos radiactivos como el cesio 134 y 137 ( no se deje engañar por otro intento tendencioso: fueron 15 atunes porque se extrajeron 15 muestras. Es decir: TODOS estaban contaminados ).
Ya se habían encontrado rastros de yodo radiactivo en las algas marinas de las costas californianas previamente a este hallazgo, lo cual indica que las migraciones han transportado la radiación varios meses antes que las corrientes de agua y viento, según afirmaron investigadores de la Universidad de Stanford.
La contaminación del Océano Pacífico también fue menospreciada ( como ocurriera en los primeros momentos del propio desastre nuclear ) y recién hace poco se ha reconocido como tres veces mayor de lo que se pensaba, lo cual, una vez más, es otra mentira, o, por decirlo en términos de metodología manipuladora mediática, una dosificación gradual de la verdad.
Por su parte, los científicos de la Institución Oceanográfica norteamericana Woods Hole se mostraron "sobresaltados y sorprendidos" por la presencia de radionúclidos en sus análisis practicados sobre los peces, lo cual también ya habíamos anticipado que ocurriría, y estas "sorpresas" seguirán "in crescendo" permanentemente, porque otra faceta de la gran mentira mediática de Fukushima es informar todo esto "como consecuencia de lo que ocurrió en los días posteriores al 11 de marzo de 2011", cuando en realidad es algo que continúa pasando constantemente al no estar contenido el desastre.
En el verano, los científicos estadounidenses afirmaron que ampliarán el muestreo y las especies a estudiar ( tiburones, tortugas marinas, aves ) "ahora que se sabe que el atún puede estar radiactivo" .
Esta respuesta sólo está reflejando lo que el sistema de informaciones oficial ( mal llamado "periodismo" ) ha decidido que la población mundial debe saber sobre el tema.
Si en cambio se analiza la realidad tal cual es, se comprende inmediatamente el interés del mencionado sistema en ocultarla: Fukushima no sólo es el peor desastre nuclear de la historia ( por lo menos cuatro veces más desastroso que Chernobyl ) sinó que de ninugna manera debe hablarse de él en tiempo pasado, ya que continúa en curso ( y éste es el mayor de todos los peligros ), y sin el más mínimo control humano sobre su evolución ( si se desea más precisiones sobre estas afirmaciones, sugerimos ver nuestros varios anteriores posts al respecto ).
La central nuclear continúa expulsando radiación permanentemtne en la actualidad: al aire, a las napas subterráneas y al mar de Japón.
La propia administradora de la planta, la tristemente célebre Tepco, contribuye constantemente a "regar" el mar con agua radiactiva, pues lo único que se está haciendo allí es bombear agua constantemente para enfriar los reactores, y cada bombeo resulta en más agua contaminada para la cual ya no alcanzan los miles de contenedores que se apilan sin saberse tampoco aún adónde irán luego a ser depositados, y una vez que esta capacidad de almacenaje es desbordada, Tepco arroja toneladas de agua radiactiva al mar.
Si Usted está pensando que por suerte se encuentra lo suficientemente lejos de Japón, piénselo de nuevo: los vientos, las migraciones animales y las mareas están globalizadas en este planeta muchos siglos antes que la humanidad.
Así pudieron comprobarlo ahora "personalmente" los investigadores de la Universidad Stony Brook de Nueva York cuando descubrieron atún rojo con contaminación radiactiva inequívocamente "made in Fukushima" en Estados Unidos.
UNA MOTOCICLETA JAPONESA EN COSTAS AMERICANAS. DE LA MISMA MANERA, VIAJAN LAS SUSTANCIAS TÓXICAS DEL MAR.
Esto además advierte sobre el verdadero nivel espantoso de toxicidad conque se ha contaminado la zona ( ya advertido por nosotros hace tiempo ) y sobre que el ingreso al mar de cesio radiactivo continúa siendo permanente y nó un hecho único ocurrido hace un año, puesto que los peces de enorme tamaño suelen metabolizar la contaminación durante las migraciones a través de 9500 kilómetros como la que protagonizan los atunes jóvenes hacia las costas de California, pero en este caso no ha sucedido.
Los expertos se apuraron en aclarar que el nivel de radiación detactado no representa ningún peligro para el ser humano ya que se trata de una concentración pequeña ( aunque es 10 veces mayor que el nivel medio registrado en años anteriores ).
También en San Diego fueron detectados 15 atunes contaminados con isótopos radiactivos como el cesio 134 y 137 ( no se deje engañar por otro intento tendencioso: fueron 15 atunes porque se extrajeron 15 muestras. Es decir: TODOS estaban contaminados ).
Ya se habían encontrado rastros de yodo radiactivo en las algas marinas de las costas californianas previamente a este hallazgo, lo cual indica que las migraciones han transportado la radiación varios meses antes que las corrientes de agua y viento, según afirmaron investigadores de la Universidad de Stanford.
La contaminación del Océano Pacífico también fue menospreciada ( como ocurriera en los primeros momentos del propio desastre nuclear ) y recién hace poco se ha reconocido como tres veces mayor de lo que se pensaba, lo cual, una vez más, es otra mentira, o, por decirlo en términos de metodología manipuladora mediática, una dosificación gradual de la verdad.
Por su parte, los científicos de la Institución Oceanográfica norteamericana Woods Hole se mostraron "sobresaltados y sorprendidos" por la presencia de radionúclidos en sus análisis practicados sobre los peces, lo cual también ya habíamos anticipado que ocurriría, y estas "sorpresas" seguirán "in crescendo" permanentemente, porque otra faceta de la gran mentira mediática de Fukushima es informar todo esto "como consecuencia de lo que ocurrió en los días posteriores al 11 de marzo de 2011", cuando en realidad es algo que continúa pasando constantemente al no estar contenido el desastre.
En el verano, los científicos estadounidenses afirmaron que ampliarán el muestreo y las especies a estudiar ( tiburones, tortugas marinas, aves ) "ahora que se sabe que el atún puede estar radiactivo" .
EL CHEF JAPONÉS KIYOSHI KIMURA POSANDO JUNTO A UN GIGANTESCO ATÚN ROJO, QUE NORMALMENTE TIENE GRAN CAPACIDAD PARA ELIMINAR LA RADIACTIVIDAD A TRAVÉS DE LA METABOLIZACIÓN. ESTA VEZ LA INTOXICACIÓN FUE MÁS ENORME QUE LAS CAPACIDADES NATURALES DEL PEZ.
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