Luego del suceso a bordo de un vuelo en Australia que ya posteamos, acaba de explotar un segundo iPhone: esta vez entre humo y chispas el aparato estalló mientras se recargaba por la noche, a pocos centímetros de la cara de su dueño, que se encontraba durmiendo cerca de la estación de carga.
Esto ya plantea extremadamente serias dudas sobre la seguridad de la batería del iPhone y del aparato en sí, que esperamos que esta vez sean atendidas rápida y eficientemente, dos características que parecen haber abandonado al servicio técnico de Apple junto con su fundador.
Este segundo iPhone 4S entró en combustión espontánea en 4 segundos ( irónicamente, el modelo, 4S, parece haberse convertido ahora en una advertencia: 4 Segundos y…¡ corra! ) y sin previo aviso en Brasil, convirtiéndose en la segunda explosión del nuevo celular en dos días.
Mashable, el blog de noticias, en su sección tecnología web y móvil, fue quien reportó el incidente: "Parece que Australia no es el único país que ha visto un iPhone 4 combustible durante la semana pasada”."De acuerdo con reportes de la prensa brasileña, el propietario del iPhone salió ileso, pero nervioso”.La compañía ha sugerido que los incidentes pueden deberse al uso de baterías falsas, pero aún cuando fuera esta la razón de la anomalía, no libera a Apple de culpa y cargo, ya que ningún otro teléfono celular inteligente del mundo ha estallado jamás porque se le aplique una batería no original.
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