Investigadores de la Universidad de California (UCLA) en colaboración con sus colegas de la Universidad de Pittsburgh, han descubierto, luego de investigar los genomas de once difrentes virus bacteriógrafos, uno que puede facilitar un novedoso tratamiento contra el acné.
El virus, inofensivo para la piel, está programado para atacar y destruir única y específicamente a la bacteria Propionibacterium acnes, causante de las espinillas y las erupciones.
Entre los genes compartidos por los virus bacteriófagos, hay uno que produce una enzima llamada endolisina, la cual descompone las paredes celulares de la bacteria y la destruye.
La investigación fue publicada en la revista mBio de la Sociedad Estadounidense de Microbiología, y afirma que, a diferencia de los antibióticos que atacan a muchas bacterias, incluidas aquellas que regulan funciones vitales del hombre, los virus bacteriófagos sólo atacan a bacterias específicas, lo que permitiría desarrollar tratamientos contra el acné que tengan pocos efectos secundarios, dado que hasta ahora mucho medicamentos inducen resistencia en las cepas del Propionibacterium acnes.
El profesor Robert Modlin, quien lideró la investigación, remarcó que “este tipo de virus ofrece una prometedora herramienta contra las cicatrices físicas.
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