En un hospital italiano situado en la localidad Pergine Valsugana, provincia de Trento, Italia, dos perras, Lusy y Glenn, han sido específicamente entrenadas en el Reino Unido para poder olfatear el cáncer en sus etapas tempranas de desarrollo en el organismo humano.
Ambas pueden identificar a través de su infalible olfato los tumores en sus primeros estadios y además son capaces de determinar el aumento de la glucosa en la sangre y otras enfermedades, oliendo la orina de los pacientes previamente purificada para liberarla de algunas partículas que pueden desorientar a los animales.
Lusy, de 6 años, sorprendió a los médicos italianos invitados a las pruebas, mientras Glenn, de un año y seis meses de edad, está aprendiendo de su colega mayor.
Si la orina contiene células cancerosas, el can se sienta frente ese ejemplar. Si el 'análisis' es negativo y el líquido corresponde a la norma, el perro se queda en pie y mira fijamente a los ojos del médico que lo acompaña.
Los científicos que trabajan con ambas perras, señalan, que las células de cáncer, así como algunos virus y bacterias, tienen un olor particular, que puede ser identificado por los canes, dotaos con 250 millones de sensores de olfato, con una precisión cercana al 90%.
FUENTE PRINCIPAL: RT ACTUALIDAD
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