En las inmediaciones del famoso lugar donde en la década del 70 tuvo lugar un supuesto aterrizaje forzoso alienígena luego silenciado por el gobierno norteamericano, el conductor de un automóvil filmó estas nítidas imágenes de un plato volador deslizándose lentamente para luego aterrizar en un polígono industrial.
La ubicación exacta y la hora del acontecimiento extra-terrestre es desconocida, como así también la identidad de quien filmó el evento, aunque se informa que fue en las inmediaciones de Roswell, Nuevo México.
El video fue subido a YouTube por Stephen Hannard, integrante del Grupo de Divulgación Alien del Reino Unido.
Muchos teóricos de la conspiración han expresado sus sospechas “on line” de que se trate de un elaborado engaño, sobre todo debido a que el lugar y el parque automotor se asemejan más al norte de Europa que a los áridos desiertos de Nueva México.
Los detractores del video también llaman la atención sobre el hecho de los sofisticados programas que existen actualmente para trucar este tipo de eventos, y creen ver algunas pistas sobre la utilización de estos softwares.
Por nuestra parte, nos mantenemos como siempre tendenciosamente semiescépticos, aunque con una observación sobre la cual no nos cabe ninguna duda: este platillo volador, que además parece tener un logo similar a la estrella que adorna las aeronaves militares de los EE.UU., de ser real no es para nada extraterrestre, sinó bien humano.
Su forma y velocidad de desplazamiento son una prueba cabal, como así también su modo de aterrizaje, que utiliza un sistema similar al empleado por los aviones Sea Harrier ingleses o Pucará argentinos.
Un OVNI alienígena ( debido a las energías que utiliza para desplazarse ) no vuela jamás en forma lineal sinó que su desplazamiento se asemeja siempre al puntero del mouse de una computadora agitado caóticamente.
Probablemente, se trate de una prueba de vuelo de alguna nueva arma secreta del ejército norteamericano.
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