lunes, 16 de julio de 2012

CHUPACABRAS, DINGONEK, FLATWOODS, NINGEN, MINHOCAO, OWLMAN, PTERODÁCTILOS: LEYENDAS Y AVISTAMIENTOS FANTASMALES DE CRÍPTIDOS


Existen cientos de fascinantes y misteriosos avistamientos y fábulas sobre críptidos alrededor del mundo, historias de apariciones breves y fantasmales, de especies perdidas, y leyendas terroríficas.

Pese a su enorme variedad, la mayoría de ellos suelen tratarse de variedades de los mismos críptidos clásicos: monstruos del lago, hombres lobo, yetis u hombres lagarto.

Estos son nuestros favoritos elegidos para este post:
EL CHUPACABRAS

Si bien este críptido tuvo en sus comienzos una determinada morfología, tamaño y anatomía que constituía una extraña mezcla de alienígena del tipo "gris" vampirizado con cuerpo de lobizón, actualmente se ha constituído en una especie de término genérico para definir el descubrimiento

( tanto mediante fotografías o filmaciones como de cadáveres ) de todo tipo de críptidos, logrando nuclear bajo esta definición una incontable variedad de testimonios de avistamientos de seres extraños y nó catalogados científicamente.

El mito parece prosperar sólo en América, ya que no se registran avistamientos en Asia, Africa, y en Europa sólo se han reportado casos muy aislados en zonas de alta montaña en España.

La vaga descripción original del chupacabras tuvo su orígen en Puerto Rico y lo definía como de tamaño pequeño de menos de un metro de altura, andar bípedo, piel escamosa, peluda y verdosa, cabeza ovalada con rasgos caninos, ojos grandes y saltones , largos y puntiagudos colmillos.

Debe su nombre a su comportamiento vampiresco, ya que ataca a sus víctimas dejándolas secas de sangre y presentando sólo un par de orificios de mordida sin destrozar el cadáver.

Aparentemente, utiliza para atacar ciertas propiedades hipnóticas similares a las de la serpiente, ya que ninguna víctima presenta signos de resistencia ni ha reaccionado alarmada, dejando muy pocas huellas en el lugar y muy lejos de sus víctimas, lo que presupone una gran capacidad para saltar.

Otra extraña particularidad de sus ataques es que los cadáveres no presentan el característico "rigor mortis".



DINGONEK
Decenas de nuevas y sorprendentes especies aparecieron cuando entre los siglos 19 y 20 los exploradores europeos se aventuraron en las selvas de África occidental, como el bongó y el okapi.

Pero junto con estas criaturas de existencia confirmada, aparecieron relatos de extrañas bestias provenientes de leyendas típicas africanas o de fugaces y confusos avistamientos a lo largo de la calurosa y húmeda selva.

De todas estas criaturas misteriosas, la más extraña es la que fuera bautizada con el nombre de "Dingonek", o "la morsa de la selva".

El famoso cazador Edgar Beecher Bronson la describió como "de cuatro metros de largo, cabeza grande como la de un león con dos colmillos muy largos que salen de la parte superior de su mandíbula, anatomía de leopardo, espalda ancha como la de un hipopótamo, con escamas como un armadillo y una cola con forma de aleta ancha. El ornitorrinco a su lado, un poroto.

EL MONSTRUO DE FLATWOODS
Esta criatura aparece más emparentada con un episodio alienígena que con un capricho de la naturaleza ( o a lo sumo, un capricho de la imaginación colectiva ): en 1952, en el oeste de Virginia un grupo de habitantes de la zona corrió hacia bosque para investigar un objeto que habían visto caer del cielo, y se encontraron con una criatura pesadillesca que medía tres metros de altura, tenía un rostro de color rojo intenso que brillaba el cual cubría con una capucha.

Su cuerpo estaba cubierto con una falda plisada de color verde oscuro, y les tendió a los aterrorizados aldeanos sus cortos brazos que dejaban mostrar largas y afiladas garras, haciendo que todos emprendieran una despavorida huida.

Al relatar el episodio, informaron que también despedía un olor pestilente que incluso provocó a posteriori irritación de garganta y nariz en algunos de los testigos. La policía atribuyó el hecho a síntomas de histeria colectiva deshechando que los habitantes de la zona hayan visto realmente tal monstruo. Sin embargo, sus características coinciden ampliamente con innumerables descripciones de dioses antiguos: estatura gigantesca, piel roja ( recordemos el caso de la tribu "piel roja" norteamericana por ejemplo, que aseguran deber el nombre de su pueblo y el tono de su piel al hecho de ser descendientes de dioses de piel colorada que provenían de un territorio destruído por las aguas ).

NINGEN

Si un críptido puede resultar aterrador, puede convertirse en algo mil veces más espeluznante si se le atribuye características humanas dentro de un cuerpo que no debería poseerlas.

El Ningen japonés ( cuya existencia fue denunciada por priemra vez por personal de un buque del gobierno de ese país que se encontraba estudiando el comportamiento de las ballenas en la Antártida ) es uno de los mejores ejemplos de esto: una extraña especie de ballena con la piel color blanco pálido, brazos humanoides y boca y mirada humana.

Hay muchas fotos y videos de esta escalofriante criatura habitante de zonas gélidas.
NINGEN 1

NINGEN 2

MINHOCAO

Esta bestia de América del Sur se parece a un gusano gigante negro con dos cuernos, y tentáculos en la cabeza.

Se lo ha reportado dejando enormes zanjas, o arrancando árboles de raíz a su paso.
Una teoría sugiere que podría tratarse de una variedad gigantesca de unos anfibios sin patas y aspecto segmentado llamados cecilias, que se introducen bajo tierra.

Esta bestia es tan famosa en Brasil que una importante autopista en São Paulo, la Vía Elevada Presidente Artur da Costa e Silva, ha sido apodada como "el Minhocão".
OWLMAN/MOTHMAN

Su primer avistamiento se registró en Point Pleasant, Virginia, EE.UU.,( donde se lo conoce como Mothman ) en 1966, por una pareja que viajaba en automóvil atravesando un antiguo depósito militar de explosivos. El fantasmagórico ser los persiguió volando a través de la carretera hasta llegar a la entrada del poblado, donde los residentes también pudieron verlo y escuchar sus escalofriantes gritos.
Una periodista que intentó escarbar más a fondo el episodio y comenzó a escribir artículos sobre el mismo en el periódico "The Messenger" denunció haber sido acosada por "hombres de negro" que le "aconsejaron"dejar de escribir artículos sobre ese tema "por su bien".

En el Reino Unido la misma criatura fue avistada cuatro veces entre 1976 y 1995 en la localidad inglesa de Cornwall.
Esta fue la descripción detallada que brindó uno de los testigos: "Era como un búho gigantesco con orejas puntiagudas, tan grande como un hombre, de ojos rojos y brillantes y con patas que eran como tenazas y garras negras y voló directamente hacia arriba..."
En 2009, se reportó otra aparición del ser y nuevamente persiguiendo al conductor de un automóvil, en este caso un joven que manejaba una camioneta Liberty en Chihuahua, México.
Su aparición suele asociarse con vaticinios de futuras catástrofes personales o de la zona donde es avistado ( una especie de "bicho de mal agüero" ).


PTERODÁCTILOS

Este ave supuestamente prehistórica que debería ser de interés exclusivamente fósil, debido a ciertos inquietantes testimonios y avistamientos ( algunos de ellos documentados fotográficamente ) ha logrado ser incluída en la colección de críptidos.

En 1858 unos obreros que estaban construyendo vías férreas para unir las ciudades de Nancy y Saint Didier ( Francia ), al dinamitar una de las rocas que se interponía en el camino, vieron pasmados cómo desde el interior de la misma salía volando un pterodáctilo, al cual derribaron con armas de fuego y luego fotografiaron ( ver abajo ).

Un sacerdote ruso llamado Saint Barsanuphius, que residía en China, en la region de Manchuria, reportó, a finales del siglo 19, el avistamiento de un pterodáctilo por parte de soldados que se econtraban apostados en la estación de Hantanza, a unos 65 kilómetros de Mullín.
Los soldados aterrorizados describieron a la criatura como un "dragón alado" que se colaba en las cuevas de la montaña, pero la descripción detallada del animal se ajustaba perfectamente a la de un pterodáctilo.
Durante el transcurso de la guerra de Secesión norteamericana, los cañones del ejército destruyeron otra roca antiquísima, similar a la del evento francés, y nuevamente para su sorpresa desde dentro de la misma salió volando un pterodáctilo, el cual también fué derribado a balazos y luego retratado. Durante esta guerra, esta situación se produjo en tres ocasiones diferentes, siendo en todos los casos muerto el animal por los soldados y luego documentado el hallazgo fotográficamente.


En 1992, un aeroplano que sobrevolaba una zona montañosa muy poco explorada de la selva brasileña casi choca con un inmenso pterodáctilo, figura que fue confirmada por un antropólogo estadounidense que se encontraba como pasajero en el avión, el doctor George Biles.
La revista People cubrió la nota en la cual se aseguraba que no se trataba de otro avión sinó de un clásico pterodáctilo blanco de alas gigantescas.
El 15 de octubre de 2002, otro sorprendido piloto de un avión de la compañía Alaska Bush vió, junto a pasajeros y el resto de la tripulación cómo a estribor de la nave los acompañaba en su vuelo una gigantesca criatura que todos coincidieron en señalar como la prehistórica ave, y que de ninguna manera podía tratarse de un águila por su estructura y envergadura ( 4,2 metros ).
El biólogo Phil Schemf dijo al respecto al diario Telegraph que "hasta donde sabemos, ninguna criatura con alas de ese tamaño ha estado viva durante los últimos diez mil años".
En 1944, Duane Hodgkinson reportó un avistamiento de pterodáctilo en Papúa Nueva Guinea, donde hoy día todavía se intenta la caza de una criatura vista por numerosos testigos llamada Ropen, que habita tierras primitivas y cuya estructura es básicamente la de un pterodáctilo.
Muchas publicaciones y organizaciones públicas ofrecen jugosas recompensas para quienes presenten pruebas irrefutables de la existencia de un críptido, pero hasta el momento no existen constancias oficiales de que esto haya ocurrido.

No hay comentarios:

Publicar un comentario