Se trata de un fármaco que reduce la grasa en las arterias y por ende previene los ataques cardíacos, pudiendo administrarse como aerosol nasal ) o también de manera inyectable ) y que podría estar disponible dentro de cinco años.
El tratamiento actual consiste en aplicar medicamentos que reduce el colesterol y la presión arterial, mientras la vacuna que está desarrollando la Universidad de Lund en Suecia es el primer método que se enfoca en la causa subyacente de la enfermedad cardíaca, ya que los depósitos de grasa suelen imponer una gran presión sobre el corazón al estrechar las arterias y volver su bombeo más dificultoso.
Con este nuevo método se estimula el sistema inmunológico del cuerpo para que produzca anticuerpos ante la acumulación grasa arterial y en pruebas con ratones, los investigadores pudieron reducir la placa en hasta un 70 por ciento.
Pruebas con 144 pacientes cardíacos ya están en marcha en Canadá y los Estados Unidos.
El tratamiento actual consiste en aplicar medicamentos que reduce el colesterol y la presión arterial, mientras la vacuna que está desarrollando la Universidad de Lund en Suecia es el primer método que se enfoca en la causa subyacente de la enfermedad cardíaca, ya que los depósitos de grasa suelen imponer una gran presión sobre el corazón al estrechar las arterias y volver su bombeo más dificultoso.
Con este nuevo método se estimula el sistema inmunológico del cuerpo para que produzca anticuerpos ante la acumulación grasa arterial y en pruebas con ratones, los investigadores pudieron reducir la placa en hasta un 70 por ciento.
Pruebas con 144 pacientes cardíacos ya están en marcha en Canadá y los Estados Unidos.
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