miércoles, 29 de febrero de 2012

¿ LA TUMBA DE JESÚS ?

Una cámara funeraria ( sobre la cual se construyó un complejo habitacional ) descubierta en Jerusalén por los arqueólogos permite especular sobre un ataúd encontrado en su interior como la última morada del protagonista excluyente de la fé cristiana, Jesús. 
Utilizando una cámara a control remoto conectado al brazo robótico de una sonda y urgando por debajo de la mencionada torre habitacional, los arqueólogos descubrieron un conjunto de cajas mortuorias conteniendo huesos datados aproximadamente como de principios del siglo 1 de nuestra era. 
Una de estas cajas de piedra caliza en cuya tapa está tallada la figura de un pez, llevaba una inscripción en griego cuya primera parte podría traducirse como 'Jehová Divino, levántalo, levántalo'. 
Sin embargo, la traducción completa y definitiva del resto del epitafio es incierto, dado las varias traducciones posibles, pudiéndose sólo afirmar que tiene algo que ver con la resurrección de los muertos, ya sea de los fallecidos en el osario, o tal vez, una expresión de fe en la resurrección de Jesús como figura religiosa emblemática. 
El dibujo de un pez con un palo en su boca se cree que podría referise a una de las primigenias historias cristianas: Jonás y la Ballena; y la razón de ser en la tumba sería confirmar la fé en la resurrección. 
También se encontró otro dibujo de la cola de un pez sumergiéndose en el agua y muchos otros peces rodeando la parte delantera de la tumba, mientras en la trasera se muestra la imagen de una cruz. 
La cámara mortuoria había sido descubierta en la década de 1980 cuando se realizó un hallazgo que fuera muy controversial en su época conocido como “La Tumba de la Familia de Jesús” ( un osario que se afirmó contenía nombres asociados con la familia de Jesús ), cuyo estudio debió ser suspendido por protestas de judíos ortodoxos que veían como blasfemia la profanación de una tumba, y la cámara se selló construyéndose sobre ella un complejo habitacional. 
Sin embargo, James Tabor, un erudito bíblico en la Universidad de Carolina del Norte y el realizador de documentales Simcha Jacobovici estaban decididos a continuar la investigación, y obtuvieron el correspondiente permiso del gobierno israelí en 2010 para usar un brazo robótico para perforar y explorar los alrededores. 
Esto llevó al descubrimiento de una cámara independiente que llamaron el "Patio de la Tumba", que se encuentra casi directamente debajo de la terraza del edificio, donde se encontraron las inscripciones ya comentadas que aumentaron aún más las especulaciones previas de que podría tratarse de la tumba de la familia de Jesús y la suya propia. 
Se cree que ambas tumbas son parte del mismo complejo que puede haber sido propiedad de José de Arimatea, quien, según los evangelios, sepultó a Jesús. 
Simples especulaciones, que como tales, pueden ser rebatidas en cualquier sentido que se elija: las imágenes iconográficas efectivamente hacen presuponer que se trata de tumbas cristianas pues en el judaísmo están prohibidas, pero la representación de Jonás era la más común en todas las catacumbas del cristianismo temprano, así como las expresiones de esperanza en la resurrección, aunque no solían formar parte de los epitafios como en este caso. 
Si se tratara de un juicio legal, cualquier corte rechazaría este tipo de “pruebas” como circunstanciales y especulativas, ya que sólo es posible probar una antigüedad y un culto consistentes con una determinada época, siendo el resto sólo especulación platónica. 
Igualmente, el descubrimiento de la tumba posee un enorme valor arqueológico, y también acarrea un importante valor comercial, que el canal Discovery Channel está dispuesto a explotar a la brevedad ( en principio el 4 de marzo en un documental dirigido por James Cameron ), basándose en un libro escrito por Simon & Schuster, titulado «El descubrimiento de Jesús: El nuevo descubrimiento arqueológico que revela el nacimiento del cristianismo" y el hallazgo de marras . 
Este descubrimiento ha hecho resurgir también asombrosas teorías como que Jesús habría sido enterrado allí junto a María Magdalena, con quien se habría casado y formado una familia, especulación negada por teólogos y arqueólogos ortodoxos como totalmente infundadas.

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