URITORCO, ERKS LA CIUDAD OCULTA, EL BASTÓN DE MANDO Y UN FINAL ENSANGRENTADO

MISTERIOS DE LAS FRONTERAS INVISIBLES

El cerro Uritorco asienta sus bases en la ciudad de Capilla del Monte, en la provincia argentina de Córdoba.

Posee casi 2.000 metros de altura y era considerado sagrado por los aborígenes que habitaban la zona en la época precolombina, los comechingones ( que poseían características físicas distintas del resto de los aborígenes de la zona: cabellos claros, gran altura y largas barbas ) y los ampajango ( mucho más antigüos que los primeros ), debido a que podían ver caminando en él a extraños seres que súbitamente desaparecían entre las piedras sin dejar rastro alguno, y a las luces que presenciaban surgir de su seno y surcar el cielo, que ellos atribuían a los espíritus de los muertos milenarios que emergían de sus tumbas.

Si bien a principios de siglo se registraron algunos episodios aislados que incluían apariciones de extrañas entidades o naves, la verdad es que nadie en Argentina se remitía a este cerro como una región con condiciones particulares hasta la llegada de los alemanes al país, un grupo de los cuales comenzó a desarrollar fuertes actividades esotéricas durante la década del 30 en la provincia de Córdoba, que incluían reuniones en el hotel Edén de La Falda con miembros del gobierno alemán e investigadores asistidos por colegas argentinos.

Este grupo, aparentemente asesorado por monjes tibetanos sobre una gran concentración de energía sagrada en el lugar, fue el primero en poner su mirada allí, y si bien no existe ninguna confirmación, fuertes rumores dieron cuenta del hallazgo de esqueletos humanos de una antigüedad milenaria como asimismo una serie de pasadizos hallados por el grupo en el cerro.

Parsifal, el caballero templario cuya búsqueda desvelaba a los teutones, habría estado en el mítico cerro en el siglo XII ( mucho antes que Colón ) guiado por la energía divina, y según una ancestral leyenda, habría depositado allí el Santo Grial y La Cruz de los Templarios que se encargarán de transmutar al hombre y completar su evolución metafísica y espiritual cuando llegue el momento.

No se sabe si atraídos por esta leyenda o a consecuencia de su veracidad, la presencia de la Orden de Los Templarios en el poblado que prospera al pié del Uritorco se hizo fuerte y permanente.También se dice que en 1938 los alemanes iniciaron la construcción de una base secreta en el interior del cerro, disimulándola con el levantamiento de un dique: Los Alzanes, que se erigió en un lugar inaccesible en medio de las sierras, a tal punto que la cal y el cemento debió ser cargado por mulas en una cantidad que, según testigos de la época, fueron de tal volumen que se podrían haber construído dos diques.

Obviamente, se desconoce también si esta base secreta perduró luego de la segunda guerra mundial como refugio de jerarcas nazis lo cual, de ser así, podría ser una explicación para los curiosos fenómenos que suceden en el cerro.

Hay quienes planetan la posibilidad de que el Uritorco sea hueco o incluso que se trate de un volcán apagado ( se han encontrado grandes concentraciones de uranio, pirita y azufre en su interior y varias depresiones que presenta su geografía podrían ser cráteres apagados ) conectado aún con el interior de la corteza terrestre, desde donde podrían provenir gases lumínicos que interactuando con los minerales y otras fuerzas telúricas podrían crear perturbaciones radioactivas o electromagnéticas capaces de originar las luces que se observan por las noches.

EL PASO DEL TREN EXPRESO

Así es como los habitantes de la zona han bautizado a los extraños y constantes ruidos intreterrenos y movimientos de tierra que se hacen escuchar bajo el Uritorco y sus inmediaciones.Se trata de fuertes y estruendosos impactos de frecuencias graves, similares a los golpes de un martillo neumático, y acompasados como los que genera un tren a su paso, o como gigantescas compuertas metálicas que se abren y se cierran.Este fenómeno ha sido reportado con similares características en casi todos los centros energéticos del planeta.

Miles de historias de misteriosos fenómenos rodean este enigmático cerro, muchas deformadas o exageradas por místicos delirantes, o por el folclore y la superstición, entre las que sin embargo cabe mencionar algunas anomalías como cuando algunos vehículos que circulan por los caminos de tierra de la zona, son arrastrados varios metros en el sentido contrario al que están avanzando sin intervención de sus conductores, tironeados por algún tipo de energía magnética, o la muerte instantánea de una persona que ingresó a uno de los túneles existentes en el cerro que supuestamente comunican con su interior, o el enloquecimiento permanente de otro que intentó aventurarse en esas mismas entradas.

Comunicaciones con elementales de la naturaleza, como duendes u ondinas son también reportadas con frecuencia, así como la aparición en fotografías de aureolas u otras manifestaciones luminosas que no se veían al tomar la foto y por supuesto, una innumerable cantidad de avistamientos OVNI de todo tipo, cantidad y formas, incluyendo un fraude perpetrado en febrero de 1988 cuando cerca de las 3 de la tarde una enorme cantidad de testigos vieron un gran objeto con forma de plato volador elevarse por encima del cerro para luego desinflarse y caer abollado ( ni los bomberos ni la policía pudieron hallar a los culpables de esta broma ).

Fue precisamente uno de estos innumerables avistamientos OVNI lo que hizo que el lugar alcanzara fama internacional, cuando el 9 de enero de 1986 tres testigos vieron un plato volador iluminando todo a su paso desde su domicilio hasta el cerro El Pajarillo ( que se encuentra a continuación del Uritorco ) donde descendió.Lo inédito fue que al dirigirse al lugar del aterrizaje, se encontraron con que la nave había dejado una huella de pasto quemado de 122 metros de largo por 64 de ancho y los árboles que se encontraban en las inmediaciones completamente secos y amarillentos.

Esta misma huella causó una nueva conmoción un año más tarde cuando el 5 de agosto de 1987 se desató un feroz incendio que quemó todo en 20 kilómetros a la redonda, pero inexplicablemente la circunferencia dejada por el objeto volador en El Pajarillo permaneció intacta ( pese a que allí los pastizales eran tan combustibles como el resto ), con todas las matas a su alrededor completamente achicharradas por el fuego.

El 21 de enero de 1988 otra nave no identificada dejó una nueva huella sobre el cerro Overo, esta vez de 42 metros de diámetro, siendo este aterrizaje observado por más de 300 testigos, que aseguraron que de la nave brotaban relámpagos que iluminaban las sierras cordobesas.

Otra huella calórica ( esta vez sin testigos de un aterrizaje OVNI en el sitio, aunque con reportes de avistamientos en zonas cercanas al lugar ) fue hallada en el pueblo de Carrizal en setiembre de 1991, esta vez con un diámetro de 12 metros.Estudios posteriores realizados por ingenieros determinaron por la quemadura que sufrieron las piedras de cuarzo a su alrededor, que la temperatura que ocasionó el fenómeno debió rondar los 3.000 grados centígrados.

EL BASTÓN DE MANDO

Orfelio Ulises era un maestro esotérico nacido en Bolívar, provincia de Buenos Aires que había realizado un viaje iniciático al Tibet en la década del 30 y a quien los lamas le habían comunicado el mismo secreto de la existencia de un sagrado triángulo de fuerzas que años después confiarían a los alemanes que construyeron el dique Los Alzanes.

Guiado por estas coordenadas y su propia intuición, Ulises encontró en 1934, en las inmediaciones del cerro, el Bastón de Mando, una pieza única de piedra basáltica pulida, llamada también Toquilítico, Piedra Del Habla o Piedra de La Sabiduría que se supone construída por los indios comechingones hace unos 8.000 años y que poseería encriptada en su interior la sabiduría de toda la humanidad pudiendo convertirse en una especie de oráculo capaz de despejar todas las eternas dudas del hombre.

Orfelio Ulises entregó, antes de morir, el bastón a su discípulo esotérico, Guillermo Alfredo Terrera, quien había sido el primer investigador que intentara explicar los fenómenos que se producían en las inmediaciones del Uritorco y el pasado extraordinario que había tenido la zona miles de años antes de cristo.Terrera recibió el bastón el 26 de setiembre de 1948 en una ceremonia realizada en la ciudad de Córdoba y mantuvo la pieza bajo su custodia en su casa de San Isidro, provincia de Buenos Aires, hasta su muerte, el 19 de noviembre de 1988.

LA CIUDAD PERDIDA DE ERKS

ERKS significa Encuentro de Remanentes Siderales Cósmicos y se supone se encuentra, invisible a las miradas no iniciadas, en el mítico Uritorco.Erigida hace millones de años por seres de una lejana galaxia, se supone la antípoda terrestre y espiritual de Shamballah y controlada por una civilización avanzada que utiliza las leyes de materia-antimateria.

Su energía es capaz de provocar transmutaciones en el hombre que ayuden a su evolución pero de la misma manera, el contacto con ERKS puede destruír todo aquello ( o aquellos ) que se niegue a su transformación.

En su interior se encuentra El Templo de La Esfera y de Los Tres Espejos purificadores de intercambio cósmico, que funcionan como una central de comunicación interdimensional e interplanetaria.Posee 7 portales: 6 etéricos ( a los cuales se puede acceder telepáticamente o a través de viajes astrales ) y uno físico.

Existen 7 centros energéticos de los cuales el principal es ERKS: Tula, en México, Los Pirineos ( entre Francia y España ), Asgar en Rusia, el monte Pérsico, la ciudad de Miztitlan y frente a la Gran Pirámide en Egipto.Hasta aquí lo enunciado por la ciencia hermética, que coincide con la mitología de los comechingones ( y con la cual nosotros sólo coincidimos fragmentaria y parcialmente ).

Conforme a nuestra manera de pensar, el hecho de que ERKS forme parte de la realidad que no se vé y se toca no escapa a las posibilidades de que sea real y esencial.Ahora bien: a partir de allí se abren dos caminos:

1) El subjetivo ( en el cual se presenta como un camino que uno debe elegir transitar ) y exclusivamente espiritual que entra en el terreno de lo arquetípico del ser humano convirtiéndose en una metáfora, y

2 ) El de una realidad coexistente con la nuestra, es decir una dimensión con una frecuencia de vibración distinta a la de nuestra propia dimensión.En el segundo caso, al tratarse de una dimensión diferente, se encontraría fuera de fase con respecto a nuestra realidad y por esa razón no habría que considerar que es invisible, sinó que no es visible desde todas las direcciones.

En tal caso, sólo sería visible desde un ángulo específico que es por lo cual algunas personas capaces de enfocar dicho ángulo pueden verla y los demás nó. Cuando se dice que los responsables de ERKS deciden manifestar la dimensión vibracional apta para que pueda ser observada por todos los ojos humanos, se hace referencia a colocar técnicamente el sitio alineado con nuestro universo.

Pero de la misma manera, si esto no ocurriera pero se colocaran múltiples cámaras ( una treintena o más ) sacando fotos simultáneamente desde múltiples ángulos en el momento en el que quien pueda visualizarla lo denuncie al fotógrafo, también se maximizarían las posibilidades de capturar su imagen.Tampoco adherimos a juicios de valor sobre una polaridad empírica determinada que pueda irradiar la ciudad, limitándonos al análisis de posibilidades sobre su existencia.

DRAMA Y LUZ

El doctor Ángel Cristo Acoglanis también se había formado en el Tibet.Allí se le había enseñado una medicina nó convencional basada en la idea tántrica del cosmos ( al estilo, por ejemplo, de la acupuntura o de las “líneas leys” ) que utiliza líneas de fuerza invisibles llamadas “venas de dragón”.Atendía en su consultorio en Buenos Aires de lunes a miércoles, el jueves en Córdoba y el viernes se dirigía a Los Terrones, un conjunto de esculturas naturales de tierra roja y piedra que asemeja formas humanas ubicada en la ladera norte del cerro Uritorco.

Escalando completamente solo a pié el lugar, Acoglanis llegaba hasta una explanada desde donde se divisaba en todo su esplendor el Valle del Silencio o Valle de ERKS, donde él consideraba estaba situada la mítica ciudad perdida, tal vez bajo la superficie o en una dimensión diferente, y allí todas las semanas realizaba sus ceremonias de invocación de ERKS. Con el correr del tiempo, estas ceremonias se fueron haciendo más frecuentes y numerosas: el doctor comenzó por invitar a amigos y pacientes íntimos pero luego se diversificó completamente , llegando a constituír un grupo heterogéneo de alrededor de 150 personas.

En las ceremonias, Acoglanis se hacía llamar Sarumah, se presentaba como un intermediario entre los habitantes intraterrenos y los humanos, aparecía con una túnica blanca, extendía sus brazos hacia el cielo y ante sus invocaciones unas luces surgían de repente ante los presentes sumergiéndose en el valle para emerger nuevamente con un tamaño mayor recorriendo el camino inverso.

Luego Sarumah explicaría que se trataba de naves y que la estrella Sirio era en realidad una gigantesca estación orbital artificial y para demostrarlo, señalándola, realizaba unas invocaciones logrando a continuación, para sorpresa de los presentes, que la estrella apague y encienda sus halos de luz a destellos pausados, en señal de saludo y bienvenida.

Luego, ante una nueva invocación, el valle comenzaba a irradiar una tenue luminosidad intermitente y aparecía ante los ojos de creyentes y acólitos una inmensa ciudad donde antes no había absolutamente nada.Con semejante presentación, las ceremonias se volvieron populares a punto de merecer una nota en la revista “Conocer y Saber” y con la fama llegaron los detractores, que acusaron al médico de hacer una fraudulenta puesta en escena con rayos láser ( ridículo en términos económicos, ya que semejante gasto jamás podría haber sido recuperado con sus 150 espectadores amén del escaso desarrollo que esta tecnología había alcanzado en ese entonces ) o que las luces procedían de automóviles en la ruta nacional Nº 38 ( también imposible ya que la misma se encuentra a unos 16 kilómetros del lugar ).

TRIGUEIRINHO
El grupo de iniciados y elegidos se fue ampliando, y Sarumah aumentó también su prestigio como sanador, comenzando a incorporarse a su séquito de seguidores personajes militares y políticos del ambiente porteño que hicieron sospechar que otros intereses comenzaban a superponerse a los espirituales.

El propio doctor Terrera asistió a una de las ceremonias con el Bastón de Mando para reprogramarlo, y un famoso escritor metafísico brasileño, Trigueirinho, comenzó a hablar y a escribir apasionadamente sobre el fenómeno ( “Erks, Mundo Interno”, 1989 ), que ya se perfilaba con enormes posibilidades de protagonizar un estallido mediático de proporciones.Y entonces…entonces sucedió lo inimaginable: Acoglanis fue asesinado por su mejor amigo, que enloqueció sin que se sepan las causas…

¿UN ASESINATO RITUAL?

Rubén Elias Antonio era el esposo de la socia y discípula de Sarumah Marisa Mur, quien regenteaba junto a su maestro “Consultorios Alternativos”, una clínica ubicada en Avenida Callao 1541 en Buenos Aires.Había sido además de su mejor amigo, el padrino de bautismo de uno de sus hijos.Inexplicablemente, el 19 de abril de 1989 a las 10:45 de la mañana Rubén Elías Antonio disparó siete veces con dos armas diferentes contra Acoglanis ( dos disparos a la cabeza con un pistolón y cinco al cuerpo con un calibre 32 ) dirigiéndose luego como un autómata a la salida, donde, al cruzarse con el portero del edificio, le dijo :”¿sabe lo que hay que hacer con los brujos?¡A los brujos hay que matarlos a todos!”.A continuación, se entregó en la comisaría 17 diciendo: “Maté a un brujo, me siento aliviado”.

Y su mirada se perdió, no siendo posible a la policía sacarle una sola palabra más. El caso quedó en manos de la polémica jueza argentina Servini de Cubría ( era la época del proceso militar en el país ) quien al preguntarle durante la reconstrucción del hecho si había hablado con Acoglanis antes de dispararle, le contestó: “ No, no podía perder la concentración.”

El móvil del asesinato jamás pudo ser establecido y la jueza, con llamativa rapidez, lo declaró inimputable por mentalmente insano y ordenó su internación psiquiátrica siendo dado de alta un año después.Ya en total libertad, se suicidó el 28 de julio de 1993 arrojándose desde la terraza de su departamento.La cantidad de disparos y la enajenación aparentemente inducida del victimario hizo pensar en la posibilidad de un asesinato ritual por parte de fuerzas antagónicas a la víctima. La oscuridad, némesis inevitable de la luz, proclamaba su advertencia del peligro que pueden encerrar ciertos caminos espirituales mientras intenten negar y ofuscar sus sombras creyendo que con esto lograrán hacer que un dios quepa dentro de un hombre, en lugar de reconocerse como una mezcla escindida entre dioses y demonios.