OTRO ALIEN RUSO

MÁS DETALLES SOBRE EL ALIEN FALSO

La historia del ahora desenmasacrado alien ruso comenzó el pasado 14 de abril cuando el usuario llamado SashafromBaikal subió a YouTube el ya famoso video que recolectó más de un millón de visitas, en el que aparecían las imágenes de un ser extraño con una pierna amputada, echado sobre la nieve y aparentemente sin vida. Los dos jóvenes autores del video, dijeron que habían encontraron el cuerpo enterrado cerca de su pueblo (situado en la república rusa de Buriatia en Siberia) gracias a un perro que había escarbado en la nieve al percibir un olor extraño.

El martes, 19 de abril, en la prensa rusa apareció la noticia de que todo había sido un fraude: la policía consiguió la dirección del correo electrónico del usuario que subió el polémico video a Internet y descubrió su identidad. Al llegar a la casa del supuesto testigo, los agentes le preguntaron dónde estaba el cuerpo del viajero interestelar. Entonces el joven tuvo que contar la verdad.

Al parecer, junto con un amigo, habían fabricado un maniquí con masa de harina cubriéndolo con piel de gallina, luego lo dejaron semi enterrado en la nieve, lo grabaron con un celular y subieron el video.

La policía concluyó finalmente que en las acciones de los jóvenes no hubo evidencias de haber cometido ningún delito y por lo tanto no serán procesados.

Este caso parece que quedó definitivamente enrolado entre los miles de virales que han aparecido en la web, pero nos trajo a la memoria el caso de otro alien ruso hallado hace más de una década en Rusia, y que dejó un halo de misterio bastante más intenso, y la sospecha cierta de ocultamiento gubernamental:
UN EXTRATERRESTRE LLAMADO ALIÓSHENKAEn 1996, en los Urales Rusos, en la región de Cheliábinsk, una mujer llamada Tamara Prosvírina encontró vivo ( aunque herido ) en un bosque a un ser extraño que tenía apariencia de extraterrestre: cabeza triangular y grandes ojos negros y 30 centímetros de altura. La mujer ( que padecía una enfermedad psíquica en estado muy avanzado ) le dio el nombre Alióshenka (diminutivo de Alexéi) y lo acogió en su casa, donde convivieron alrededor de un mes. La salud de la mujer se agravó y debió ser internada y como vivía sola, el extraño ser al no recibir más cuidados, falleció.

Un vecino de Tamara que había entrado con no muy buenas intenciones a la casa abandonada por Prosvírina encontró el cuerpo, decidió momificarlo al sol y quedárselo.

Unos meses después, el hombre cometió un robo y fue apresado por la policía, y en el transcurso del interrogatorio, entre otros ilícitos reveló la posesión “del cuerpo de un extraterrestre”, al agente policial que se encargaba de hacerle las preguntas.

El policía se interesó por el misterioso hallazgo, buscó el cuerpo momificado y se lo mostró a un forense. El estudio hecho por el especialista, concluyó que el cuerpo tenía muchas diferencias con un cuerpo humano: el cráneo parecía un casco triangular y estaba compuesto por cuatro huesos, no tenía ombligo y no se pudo identificar su sexo.

Para hacer un exámen más concluyente, se neceistaba una prueba de ADN que, sin embargo, no fue realizada, ya que no se había iniciado una investigación oficial del caso.

Durante algún tiempo el cuerpo momificado de Alióshenka permaneció en la casa del policía quien más tarde lo entregó a un supuesto grupo de ufólogos para su análisis, y desde aquel momento las huellas de la enigmática momia se perdieron para siempre.

Sin embargo, el “ruido” del caso ya había trascendido fronteras, y una cadena de televisión japonesa se mostró interesada en rodar una película sobre el fenómeno. Tanto periodistas como los guionistas del futuro film pautaron una entrevista con Tamara Prosvírina, pero la mujer falleció atropellada por un camión poco antes de la llegada de los nipones, quedando como único testimonio de la existencia de este enigmático ser un video grabado por el agente policial.